GNL y transición: puertos multipropósito para la próxima década
La transición energética redefine el rol de los puertos. Chile avanza hacia terminales multipropósito capaces de recibir Gas Natural Licuado (GNL), hidrógeno verde y energías limpias, consolidando su infraestructura para los próximos 10 años.
De puertos tradicionales a hubs energéticos
Durante décadas, los puertos chilenos se han enfocado en carga general, contenedores y graneles. Sin embargo, el cambio climático y los compromisos internacionales de descarbonización obligan a rediseñar la infraestructura portuaria. El Gas Natural Licuado (GNL), aunque no es renovable, se ha convertido en el “combustible puente” para reducir emisiones en comparación con el carbón y el diésel. Esto explica la creciente importancia de los terminales que puedan recibir y procesar este recurso.
Puertos multipropósito: una visión al 2035
El concepto de puerto multipropósito se proyecta como el estándar de la próxima década. No se trata solo de recibir contenedores o graneles, sino de ser nodos logísticos capaces de manejar:
- Descarga y regasificación de GNL.
- Almacenamiento y exportación de hidrógeno verde.
- Conexión con parques eólicos y solares para exportar energía.
- Carga general y contenedores en un mismo complejo.
Chile en la ruta del GNL
Actualmente, Chile cuenta con tres terminales principales de GNL: Quintero, Mejillones y Penco-Lirquén (en desarrollo). Estas instalaciones no solo garantizan el suministro energético local, sino que además podrían convertirse en plataformas regionales para el comercio de gas y energías limpias.

Integración con la transición energética
La Estrategia Nacional de Hidrógeno Verde de Chile plantea que al 2030 el país será uno de los tres mayores exportadores del mundo. Para alcanzar esa meta, los puertos deben transformarse en plataformas intermodales capaces de despachar combustibles limpios hacia Asia, Norteamérica y Europa. El GNL juega aquí un rol transitorio: asegura la estabilidad de suministro mientras la matriz energética se reconvierte hacia renovables.
Puertos en competencia y cooperación
San Antonio y Valparaíso avanzan en planes de infraestructura, pero los puertos del norte —como Mejillones— tienen ventajas en el acceso a energías renovables y minería del cobre y litio. Estos factores podrían convertirlos en nodos estratégicos de la transición energética global.
Desafíos por resolver
Pese al potencial, la transición enfrenta retos:
- Altos costos de inversión en infraestructura multipropósito.
- Necesidad de marcos regulatorios claros para GNL e hidrógeno.
- Coordinación entre sector público y privado.
- Competencia internacional, especialmente con puertos brasileños y peruanos.
Una década decisiva
Los próximos diez años serán clave para definir si Chile se consolida como líder regional en infraestructura portuaria energética. Los puertos multipropósito no solo permitirán abastecer la matriz nacional con GNL, sino también abrirán la puerta a la exportación de hidrógeno verde y energías limpias. Esta combinación puede transformar al país en un actor estratégico del comercio energético global.
La transición energética no se jugará únicamente en los parques solares del desierto o en las turbinas eólicas del sur: se decidirá también en los muelles, grúas y terminales que conectan a Chile con el mundo.

Deja una respuesta